Adriana llevaba años viviendo en Tetuán, en un piso sencillo de la calle Campo Real 16, barrio de Berruguete, pero en los últimos meses su vida había empeorado considerablemente. Divorciada, extranjera, en paro y madre de dos mellizos de 7 años, enfrentarse al desahucio ha sido su gran pesadilla.
A las puertas de Bankia. Foto: BeaBurgosLa lucha contra Bankia por defender a Adriana y su familia ha sido protagonizada por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Madrid (PAH) y por la Asamblea del 15M de Tetuán (APT). “Han estado conmigo en todo momento, a pesar de la lluvia que caía. Los vecinos se agolparon un día sí y otro también a las puertas de la sucursal para mostrarme su apoyo”, decía Adriana.
En esta última semana Adriana prácticamente ha vivido dentro de la sucursal de Bankia, en Ofelia Nieto 7. Desde que abrían las puertas a las 9 de la mañana hasta las 2 de la tarde, hora en que el guarda de seguridad le anunciaba que debía retirarse, la joven colombiana vecina de Tetuán no ha cejado en su intento de detener el desahucio al que se enfrentaba.
Mientras, activistas de la PAH y vecinos de la Asamblea Popular de Tetuán (APT), nacida al amparo del 15M, a los que se negaba el acceso, se reunían a las puertas de la oficina de Bankia desde las 10:30 de la mañana para apoyar su causa.
Además de popularizar en Twitter el hashtag #Adrianasequeda para concienciar sobre el apoyo a esta vecina, la APT ha propuesto varias medidas de presión contra la sucursal de Bankia en estas últimas semanas. Desde los medios sociales, han difundido el nombre de la directora y el teléfono de la sucursal – a través de su blog, de Facebook y de Twitter – para invitar a toda la gente a llamar y a presionar. Además, han propuesto enviar un fax con el mensaje “¡Paren el desahucio de Adriana y sus hijos!” a la sucursal. “La directora y la subdirectora de la oficina nos han confesado que estaban agotadas con nuestra cabezonería de esta semana”, dicen desde la Asamblea de Tetuán.
Finalmente, el jueves 8 de noviembre, el abogado de Bankia se puso en contacto con el abogado de Adriana, para garantizarle que Adriana podrá acogerse al alquiler social pactado, un desenlace feliz para un drama por el que ya han pasado varios vecinos de Tetuán. Si hace un año vivíamos el desahucio de Anwar y Tatiana en la calle Naranjo, del que salieron airosos y finalmente lograron firmar la dación en pago, Teresa no corría la misma suerte y tenía que abandonar su vivienda en la calle de Berruguete, a pesar de su enfermedad.
El fin del desahucio de Adriana culmina con el acuerdo de pagar un alquiler será de 220€. Con ello, Adriana, que de momento se mantiene con lo que cobra del paro, podrá quedarse en su vivienda. “Yo aún no he firmado nada, hasta que no tenga los documentos firmados y en mi mano, no me lo creo, pero hoy respiro más tranquila“, decía ayer Adriana con satisfacción.
Con la llamada de Bankia se paraliza el desahucio que pendía sobre Adriana, previsto para el próximo lunes 12 de noviembre y se desconvoca la llamada que a lo largo de estas semanas ha corrido como la pólvora a través de las redes sociales.
Periodista y editor experimentado se especializa en política y economía de España. Desde 2010, trabaja en destacadas publicaciones españolas, donde cubre eventos clave y analiza tendencias actuales. Sus artículos son reconocidos por su enfoque analítico profundo y su imparcialidad. Se graduó en la Universidad Complutense de Madrid, donde estudió periodismo y relaciones internacionales. En su tiempo libre, disfruta de los viajes y la gastronomía.
